El Ministerio de Relaciones Exteriores de Japón ha dado a conocer su respuesta a las directrices de las Naciones Unidas recientemente publicadas que etiquetan los dibujos de niños inexistentes como pornografía infantil.
La respuesta, que se puede leer fácilmente como «no haremos nada al respecto», también reveló que las nuevas directrices publicadas por las Naciones Unidas no implicaban la participación de Japón en los debates ni de ninguna otra parte firmante.
Lo que es aún más significativo es que Japón califica claramente las directrices de la ONU de no vinculantes para ninguna de las partes firmantes.
La traducción aproximada de la respuesta del Ministerio de Asuntos Exteriores de Japón:
La opinión del Gobierno sobre la publicación de las «Directrices para la aplicación de los protocolos sobre la venta de pornografía infantil».
- El 17 de septiembre, el Comité de los Derechos del Niño publicó nuevas directrices sobre la trata de niños, la prostitución infantil y la utilización de niños en la pornografía.
- Este gobierno es consciente de que se debe considerar cuidadosamente cuando se trata de asuntos cubiertos por los tratados existentes. A finales de marzo de este año, se presentaron al Comité opiniones sobre estas directrices. Sin embargo, es lamentable que estas directrices se publicaran sin un debate significativo con ninguna de las partes firmantes, incluido Japón.
- Esta directriz fue presentada por el Comité como guía para la aplicación del tratado[de los Derechos del Niño que Japón firmó]. Estas directrices no modifican el tratado en sí. No son en modo alguno jurídicamente vinculantes. La posición de este gobierno con respecto a estas directrices facultativas ha sido la de enviar múltiples solicitudes al comité, que ha confirmado que estas directrices no son jurídicamente vinculantes para ninguna de las partes firmantes.
- El Japón seguirá prestando mucha atención a estos debates. Expresaremos nuestras opiniones cuando sea necesario.
Tal como están las cosas, Japón continuará luchando contra las demandas irrazonables que equiparan los pensamientos de la gente a los crímenes y no tomará medidas enérgicas contra los creadores que simplemente expresan sus libertades a través del arte que producen.